Fecha de nacimiento: 12 de Enero de 1953
Doña Rosa o Rosinha como la suelen llamar, siempre ha tenido una gran pasión por las actividades de la iglesia. Además de abrir el Monasterio de Mancelos a los visitantes, es celadora desde finales de los años setenta, lectora y miembro del coro. También fue catequista.
El momento más emotivo de su vida en el Monasterio de Mancelos fue su primera comunión, un día marcado por las inolvidables palabras del párroco.
Afirma que los visitantes, extranjeros y nacionales, admiran las características del estilo románico del Monasterio de Mancelos. También declara que las personas aceptaron bien la integración del Monasterio en la Ruta del Románico, ya que fue bastante «positiva, incluso para las obras... si no fuera por la Ruta del Románico, no se habrían realizado las obras». Confiesa que ha adquirido muchos conocimientos que ha compartido con su familia y sus vecinos.