En las tierras de los valles de Sousa, Duero y Támega se yergue un importante patrimonio arquitectónico de origen románico. Este legado es la piedra angular de la identidad cultural y territorial de la comunidad que lo debe entender, sentir y valorar. Sensibilizar a los ciudadanos sobre el tema del patrimonio histórico, arquitectónico, inmaterial y paisajístico, despertándolos a la importancia de preservar sus recursos, constituye un importante elemento de integración, educación y formación de las poblaciones.
En las tierras de los valles de Sousa, Duero y Támega se yergue un importante patrimonio arquitectónico de origen románico. Este legado es la piedra angular de la identidad cultural y territorial de la comunidad que lo debe entender, sentir y valorar. Sensibilizar a los ciudadanos sobre el tema del patrimonio histórico, arquitectónico, inmaterial y paisajístico, despertándolos a la importancia de preservar sus recursos, constituye un importante elemento de integración, educación y formación de las poblaciones.